La cuarta y última mesa redonda organizada por las alumnas de Promoción de Igualdad de género se titulaba “Mujeres que rompen moldes”. En ella participaron tres mujeres que trabajan en sectores masculinizados: la minería (Luz), la pesca (Manuela) y la ingeniería (Beatriz).
Las ponentes coincidieron en que aunque en el ámbito académico las mujeres son las que están más preparadas, a la hora de enfrentarse a la vida laboral sobre todo en las profesiones masculinizadas, el porcentaje es muchísimo menor. Coinciden también que a lo largo de su carrera profesional se han enfrentado a muchas barreras, tales como, discriminación, desconfianza, incluso con barreras familiares.
Resaltaron también la importancia de la corresponsabilidad y la coeducación para que las mujeres puedan dedicarse a lo que deseen y no tengan que rechazar ningún tipo de trabajo o ascenso por ello.
Cabe destacar también lo importante que es la implicación de las Administraciones Públicas para alcanzar la igualdad real en el ámbito laboral, y aunque afirman que a día de hoy se están dando pasos, también señalan que todavía queda mucho por hacer. En las últimas décadas se ha avanzado mucho para que exista la igualdad formal pero no existe una igualdad real, por eso hay que seguir luchando.
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